PLANTEA G

Desde todos los orbes se comenzó a estructurar el terreno para los 17M. Al principio, fueron sus fronteras construidas con bits y esas pudieron estar libres del sometimiento del gran .COM (un dispositivo planetario que había comenzado, en los albores, a abducirse a los territorios virtuales).

En el ambiente físico, todo caminaba como se venía trabajando desde hace muchos años y resultaba con gran precisión. Al ya tener capacidades extremas de exterminio y potencias de fuego, se comenzó a impactar de lleno a uno de los territorios limítrofes de los 17M. Se usaron dos de los tres dispositivos de castigo monumental: el primero fue el desplazamiento focalizado de los terrenos y el segundo un impacto, con suficiente fuerza, para provocar un deterioro profundo en la superficie y contaminar el ambiente circundante.

El caso puntual, en ésta etapa, era que los castrenses de los 17M, al estar ya con una iniciativa por CADI y estar en completo armamento, podían contemplar un desplazamiento del nuevo orden de las fuerzas bélicas. Dado que el proyecto determinaba sin cuestionamientos que había que alcanzar supremacía en la relación y vinculación extrema, los escenarios caóticos y turbulentos escondían aquellas tendencias para crear las capacidades buscadas.

Más allá, en el objetivo de mayor cuantía, el aislamiento se cernía sobre aquella población. Las divisiones internas florecían y alzaban para encender trifulcas sociales y detención de las producciones. El Gobierno no alcanzaba a implementar sus políticas y el pueblo, manipulado, exigía que se le respetaran sus demandas, las cuales carecían de sustento y cohesión para construir una población autónoma. Tal escenario era la condición propicia para generar un nuevo terreno para los 17M.

Mientras Plantea ya llegaba al fin de su tránsito estable por el cosmos, el factor de equilibrio interno comenzaba a funcionar. Sin lugar a dudas las mentes superiores reconocían que la esfera de vida, al ser un cuerpo celeste con vida, condicionaría vastos elementos para darse equilibrio y los parásitos que vivían de ella y no estaba cooperando para mantener el equilibrio serían castigados.

Otro factor que también entraba en fase de ajuste era el sistema de desplazamiento de capitales. El Mercado y el Dinero, El Capital y Las Industrias, esperaban mantenerse a flote cuando el Crak llegara hasta todo el orbe. La inyección por parte de los gobiernos para darle respiro al sistema, solamente era una medida de aguante para que todo encajara en el tiempo estimado.

Uno que otro sistema hacia lo suyo y lo más contundente era observar como los cronistas hacían un registro, cabal, de las circunstancias. Todos lo que estaban en esos procesos sabían que no serían tomados en cuenta en el presente y trabajaban con ahínco para alma-sen-ar los antecedentes y construir las bases que nutrirían los nuevos esquemas comunicacionales de la nueva era que se avecinaba; la cual estaría caminando, sin detención, luego que el debacle diera lugar al avance.

Al ver que unos comenzaban a trabajar en estas empresas, el Gobierno Central de los 17M dispuso que todos los cronistas, especializados, tuvieran a cargo una unidad de trabajo específico. La recolección de datos y contención del periodo, fomentó una de las mayores estructuras para edificar la historia del Proyecto CADI y cautelar la continuidad, en buen pie, de la patria seleccionada de Plantea.

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